“Un hombre caudaloso quería a toda costa tener un hijo para prolongar su estirpe. Esto llegó a ocurrir, pero grande fue su sorpresa cuando se ve obligado a reconocer que su hijo había nacido deforme y defectuoso. Después de un momento de tristeza, no se amilanó y se empeñó en que todas las cosas en su gran mansión fueran tan deformes como él. De este modo, ordenó que todo lo que lo rodeara fuera también defectuoso: los muebles, los espejos, el piso, la luz, los sanitarios, la cocina, los vestuarios, y especialmente la servidumbre, que estaban todos llenos de distorsión en sus cuerpos y en sus conductas.
Todo, con tal que su hijo se sintiera un ser normal,
vivo, bello.
El tiempo fue pasando en la gran mansión de este hombre, y su hijo fue creciendo, atendido amablemente por toda clase de monstruos. Pero un día, ya joven y con ganas de conocer el mundo, llega el momento de conocer la calle.
Es allí donde empezó la vida verdadera de este joven”
Apretado y unilateral resumen de la novela
“El obsceno pájaro de la noche” de José Donoso (Chile)
Pocos años atrás, como parte del periódico donde entonces escribía, fui testigo de las extraordinarias luchas que llevaron adelante los profesores del país. Enormes masas de profesores, de base en base, de asamblea en asamblea, con los padres de familia, recorrieron el país, desde los rincones más lejanos hasta las ciudades principales del Perú, y finalmente en Lima, con una línea unánime de rechazo al plan de municipalizar la educación. En estos días el premier ha anunciado la renuncia del Estado a ese propósito. No ha caído del cielo ese logro. Se debe al FRESUT y al CONARE que, en medio de contradicciones de dos líneas, encabezó esa lucha. Saludo y felicitaciones a esos gremios pues lo dicho por el representante del gobierno es el reconocimiento de su derrota. Han sido los maestros y el pueblo quienes se fajaron en defensa del derecho del pueblo a la educación y demolieron esa ley nefasta. No ha caído del cielo.
Sabemos que el FRESUT se desarrolló sobre bases ideológicas y políticas correctas, en medio de la lucha de clases. No tienen otro origen sus dificultades, sus contradicciones con Puno en la II Convención Nacional, en el III Congreso del CONARE en Ayacucho donde estuvimos personalmente y palpamos la lucha interna de los profesores en función a combatir a los escisionistas. Asistimos a las tres huelgas nacionales de gran repercusión, con la respuesta heroica del pueblo ayacuchano ante el abaleamiento de decenas de profesores. Miles de masas se movilizaron contra la municipalización de la educación, se crearon frentes de defensa de la escuela pública conformados por maestros, padres de familia y dirigentes de las comunidades, existe material fílmico y fotográfico al respecto.
Mientras este esfuerzo organizador era negado por quienes lo miraban desde el balcón, los integrantes del FRESUT recorrían el país de norte a sur, y por costa, sierra y selva. Eso me consta, y las críticas que recibía de “frentismo” o “sindicalerismo” carecían de fundamento si venían de quienes durante mucho tiempo nunca los vimos en los mismos trotes de fundirse con las masas del país. No me extraña que produzca escozor recordar la labor del FRESUT, o de la Coordinadora Popular “1ro de mayo” o de los “Jóvenes de Mayo”, en esos espacios se dieron los inicios que reagruparon las fuerzas dispersas en tantos años de aislamiento, y muchos jóvenes conocieron nuestra posición a través de ellos, fue su semillero. Pero ahora que estamos viviendo otros tiempos no hay vientos que impidan que saludemos y felicitemos al FRESUT y al CONARE por tan importante logro.
EL DIRECTOR
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