Queremos expresar nuestro
reconocimiento a la Revista Culturales 1° de Mayo, por haber publicado nuestro
anterior artículo que, con el humilde propósito de aportar en el debate sobre
la realidad de la política actual, lo hicimos extensivo apelando a una
confrontación dialéctica puesto que el conocimiento es problema de la ciencia y
no admite la menor deshonestidad ni la menor presunción. Lo que exige es
ciertamente lo contrario: honestidad y modestia.
Sin embargo como contraparte, hemos
recibido una arrogante y dictatorial respuesta a nombre de una supuesta
organización. Recurriendo al Maoísmo encontramos que esto es considerado
perjudicial al desarrollo de la ciencia pues, acudir a medidas administrativas
para imponer un particular estilo de arte o escuela de pensamiento y prohibir
otro, es ajeno a él, y nos machaca que el problema de lo correcto y lo erróneo
en el arte y en la ciencia debe resolverse mediante discusiones libres en los
círculos artísticos y científicos, a través de la práctica del arte y de la
ciencia, y no de manera simplista.
Esta expresión debela claramente una
posición no proletaria, por cuanto la arrogancia es expresión del ego
elevadísimo que cultiva la burguesía. Por esto quienes, en vez de educar
continúan en su afán de mantener a un ejército sin cultura, cuestionando que un
ejército sin cultura es un ejército ignorante, y un ejército ignorante no puede
derrotar al enemigo, enseñanzas proletarias que prefieren no asumir.
De manera que como sustento ante las posiciones
de la izquierda nos dicen: …”carente de todo sustento, una vez más, son
palabras que se la lleva el viento y que no resisten ningún análisis”… Para la
izquierda la complacencia es enemiga del estudio y si queremos realmente
aprender algo, debemos comenzar por deshacernos de la complacencia, es más,
nuestra actitud hacia nosotros mismos debe ser aprender sin sentirnos jamás
satisfechos, y hacia los demás, no cansarnos de enseñar.
Las masas requieren argumentos sólidos
y no reducir a…”ya lo dijimos”…, sin aportar nuevos argumentos a sus tesis que
sostienen, dejando de lado los temas centrales que conciernen a la aplicación
de la línea proletaria en la lid contra la burguesa que enarbolan en su afán de
imponerla, sacando citas fuera de contexto y no ligarlas con todo el contenido,
típico método oportunista de “debatir”, claro abandono de la ideología, la que
enmascaran con su dogmatismo repetitivo. Es oportuno recordar lo que J.C. Mariátegui
nos demandara: “Todo debate se abre para los que opinan, no para los que
callan.” (Nosotros le agregaríamos: menos para los que enmascaran sus
posiciones). Y es correcto lo que nuestros clásicos nos enseñan: que la
polémica es útil cuando se propone verdaderamente esclarecer las teorías y los
hechos, y cuando no se trae a ella sino ideas y móviles claros. Debemos aplicar
al Pdte. Mao Tse Tung que nos dice: …”Que se abran cien flores y compitan cien escuelas
de pensamiento”... Es necesario aplicar estas sabias enseñanzas porque con ella
podemos aprender lo que ignorábamos pues no sólo sabemos destruir el mundo
viejo, sino que también sabemos construir uno nuevo.
Nuestras ideas y móviles son
cristalinos tal como lo expresamos en el artículo en debate. Pues bien, veamos,
en lo ideológico nos imputan que nos oponemos al Marxismo-Leninismo-Maoísmo y a
la vanguardia del Proletariado arguyendo que no lo mencionamos. Les remitimos
al párrafo 5° (léanlo bien), allí planteamos claramente nuestra posición sobre
esos dos puntos en los que nos reafirmamos; que las masas responden con luchas
políticas masivas, las que se ven limitadas de unirse por falta de una
dirección proletaria, por cuanto sus vanguardias han abandonado la ideología,
por lo que como tarea urgente queda la necesidad de poner como mando la
ideología del proletariado en el mundo, invicta e inmarcesible, nunca derrotada
y menos en crisis. Les preguntamos ¿cuál es la única ideología del proletariado
invicta e inmarcesible nunca derrotada y menos en crisis?, para nosotros es
pues, el marxismo-leninismo-maoísmo y es ésta la que tenemos que entronizarla
en el proletariado internacional, principalmente poner el Maoísmo como mando y
guía de la Revolución Proletaria Mundial por ser la nueva, tercera y superior
etapa del Marxismo, Uds. no la enarbolan, menos la aplican, por que la han
abandonado remplazándola por la ideología burguesa. El Pdte. Mao nos enseña que
el revisionismo u oportunismo de derecha es una tendencia ideológica burguesa,
es más peligroso que el dogmatismo. Los revisionistas, oportunistas de derecha,
alaban de palabra el marxismo; también atacan el dogmatismo, pero lo que atacan
es precisamente la quintaesencia del marxismo… Así, vuestra tesis derechista en
la que afirman que “el pueblo no puede unirse por haber abandonado la ideología”,
y en su esfuerzo por esconder sus arteras posiciones culpan descaradamente al
pueblo de sus propias debilidades, infamándolas, negro criterio ligado a su
tesis de que la “ideología está en crisis” y luego agregan “crisis de
desarrollo”, poniéndole parches como siempre lo hacen cuando se ven
descubiertos; haciendo ver así mismo, que para Uds. entre los dos aspectos de
la contradicción, es lo externo y no lo interno el que determina el proceso.
En cambio para la línea proletaria lo
interno es lo principal y define, y lo externo coadyuva. Por eso persisten en
hablar de “crisis de la ideología”. Es verdad que hay nuevos problemas, que la
lucha de clases y la necesaria transformación de la sociedad nos impone, pero
de ahí no se puede deducir crisis de la ideología; sino la obligación que
tenemos de aplicar nuestra todopoderosa ideología y resolverlos. Esta es pues
tarea de la Vanguardia organizada del proletariado, encarnando que las
condiciones cambian permanentemente y para adaptar su pensamiento a las nuevas
condiciones, uno debe aprender; incluso quienes tienen una mayor comprensión
del marxismo y se mantienen comparativamente firmes en la posición proletaria, deben
continuar aprendiendo, asimilar cosas nuevas y estudiar los problemas nuevos.
Agregamos sobre este punto de la
ideología, ¿acaso no es cierto que vienen planteando la “necesidad de
reformular la ideología”. ¿Cuál es el fondo? ¿Nueva síntesis de Bob Abaquian?
Todo ello es, pues, abandono de la ideología del proletariado, la que
enmascaran con su dogmatismo repetitivo. El problema de la ideología del
proletariado no es recitarlo, sino aplicarlo como luz y guía para el análisis y
solución de los nuevos problemas que la realidad concreta nos plantea, con
independencia ideológica-política y orgánica, y no estar a la cola de la burguesía,
como por ejemplo con el problema de la llamada “bipolaridad en ciernes”, que es
debate de la burguesía y su preocupación es: “¿Cuál será la superpotencia del
siglo XXI? EEUU o China?”, y “de crear a mediano plazo las
condiciones propicias para que se produjera una transición pacífica de un mundo
unipolar a un mundo multipolar.”(Transición pacífica que con vuestro cretinismo
parlamentario pregonan y es lo que les une, que lo desmenuzaremos). Tesis de la
Sra. Naghman Salman, no creemos que no sepan a quién representa. En esencia el problema
de ellos es que están en busca de a qué árbol, que de más sombra arrimarse, eso
es lo que están buscando, por cuanto saben que el imperialismo yanqui está en
declive pues, ya ha entrado a transitar el camino de su hundimiento y ruina
inexorable, lo que nos lleva a reafirmarnos en la meta final de la humanidad:
El comunismo, nuestra brillante e inexorable perspectiva, y en la era en que
nos ha tocado vivir, que es la era de la revolución proletaria mundial.
La izquierda se reafirma en que la
ideología del proletariado es el Marxismo-Leninismo-Maoísmo, invicto e
inmarcesible, nunca derrotado, menos en crisis, y que nuestro problema no es
ponernos a la cola del debate de la gran burguesía y servir a crear
confusiones, aunque tenemos que tomarlo en cuenta para aprovechar sus
contradicciones, sino reafirmarnos y asumir nuestra brillante perspectiva,
actuando en la era que nos ha tocado vivir para con nuestra acción consciente,
acelerar el proceso de transformación, que es nuestra obligación. (CEJCM)
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