El movimiento popular en Chile tiene como principales protagonistas a sus jóvenes, que en su lucha por reconquistar el derecho fundamental a la educación pública y gratuita, tomaron la Casa Central de la Universidad de Chile. Aquí sus declaraciones al respecto.
El año pasado miles y miles de chilenos nos volcamos a las calles, demostrando que el mercado en la educación fracasó, y que si queremos ser un país justo y desarrollado necesitamos una educación pública, gratuita, y de calidad para todos. Convocamos a marchas históricas, llenas de alegría, música y creatividad.
El año pasado miles y miles de chilenos nos volcamos a las calles, demostrando que el mercado en la educación fracasó, y que si queremos ser un país justo y desarrollado necesitamos una educación pública, gratuita, y de calidad para todos. Convocamos a marchas históricas, llenas de alegría, música y creatividad.
Sin embargo, nuestras ganas no fueron suficientes.
Nos enfrentamos con una institucionalidad que nos cerró la puerta en la cara.
La policía nos perseguía, golpeaba y amedrentaba. Nos amenazaron con quitarnos las
pocas becas que tenemos y aumentar nuestros años de endeudamiento por perder el
año académico. A cientos de escolares los
intentaron expulsar de sus
establecimientos, y un compañero murió por la bala disparada por un carabinero.
Este año la tónica no ha sido
demasiado distinta. Como movimiento hemos hecho esfuerzos por recomponer
nuestra fuerza, duramente atacada el año pasado. Comenzaron a florecer
federaciones de estudiantes en universidades privadas y comenzaron a incorporarse
al CONFECH. Se forjó una alianza con el mundo secundario y nos volcamos a
trabajar en propuestas, y compartirlas entre los estudiantes, las familias, el
Gobierno y el Parlamento. Sin embargo, nuestras demandas, síntesis de los
anhelos de la mayoría de Chile, siguen encontrándose con el muro de un gobierno
indolente, que permanece indiferente a los sueños de nuestras familias.
Nuestra fuerza no ha sido suficiente, es
imposible desconocerlo. Pero esta ineludible autocrítica debe ser, sobretodo,
una oportunidad. Desde diversas instancias hemos convocado a hacer de Agosto un
mes movilizado, que nos sirva para terminar de rearticularnos como movimiento
estudiantil y pasar a la ofensiva, refortaleciendo además la transversalidad
que ha caracterizado a este movimiento. En este contexto, como Pleno FECh iniciaremos
un proceso de discusión en toda la Universidad, que durante los días lunes y martes
permita definir los próximos pasos a seguir. Más aún, algunas Facultades ya
están entrando en un paro académico y otras están dando discusiones en la misma
dirección.
Dentro de ese proceso de discusiones,
todos votaremos en nuestras Facultades e Institutos la aprobación o rechazo de
la toma de nuestra Casa Central actualmente en curso. Sin embargo, los debates
no se agotarán solamente en eso, pues comprendemos que ninguna toma ni movilización
es sostenible sin la participación activa de los compañeros en torno a
objetivos claros. Esa es la claridad que apostaremos a construir durante estos
próximos días, definiendo de manera depurada aquellos aspectos de la agenda del
gobierno que buscamos frenar porque constituyen retrocesos en nuestro objetivo
de fortalecer la Educación Pública (como son por ejemplo los actuales proyectos
en tramitación de ajuste tributario, superintendencia y ‘ley Hinzpeter’), los
avances que con realismo y esperanza queremos conquistar hacia un nuevo sistema
educacional (como fin al lucro, democratización de las instituciones, el
aumento de su financiamiento) y las formas de movilización que sostendremos en
función a estos objetivos.
Finalmente, queremos plantear un
llamado al resto de las universidades a hacernos cargo del momento histórico.
La educación chilena vive una encrucijada, y los anhelos de miles y miles de
chilenos hoy buscan ser acallados con sesudos gráficos y gases lacrimógenos. Nuestra
creatividad, nuestra amplitud, nuestra capacidad de converger entre todos los
que queremos una educación y un Chile distinto, y nuestra iniciativa frente a
la coyuntura, serán determinantes en lo que ocurra en nuestro país en los
próximos años. De nosotros depende.
Mesa Directiva FECh 2012
Gabriel Boric – Presidente/ Camila
Vallejo – Vicepresidenta/ Felipe Ramírez – Secretario General
/ Andrés Fielbaum – Secretario de
Comunicaciones/ Julio Maturana
–
Secretario Ejecutivo
¡ALTO A LA PERSECUSIÓN POLÍTICA!
¡RECHAZAMOS ATROPELLO A REVISTA
VÓRTICE!
En un operativo de “alta y fina
inteligencia”, dirigido por el procurador antiterrorista, Sr. Julio Galindo, se
ha intervenido el local –públicamente conocido- de la Revista Vórtice, para
embargarle un número indeterminado de copias de la revista. Según informó el
propio Galindo, la operación se realizó con el apoyo de Radioprogramas del Perú
(?) y del congresista Octavio Salazar, y tiene el propósito de castigar a
quienes demandan amnistía general y consideran que el pensamiento Gonzalo es un
sistema de ideas. Este es otro exabrupto de la persecución política iniciada
por el régimen, a punto de ser legalizada con la “ley del negacionismo”.
Llamamos a pronunciarse a todos
aquellos que hacen del lenguaje y la comunicación su instrumento y expresión de
su libertad democrática. Y nos preguntamos ¿quién le dio autoridad al Sr. Galindo
para establecer lo que deben leer o no los ciudadanos en el Perú? (Revista
Culturales 1º de Mayo)
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| Vórtice es una revista de circulación pública que se vende en puestos de periódicos desde el año 2005 |
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